Para hacer frente a la COVID-19 no existe una fórmula milagrosa, pero sí está demostrado que llevar un estilo de vida saludable y tener unos buenos hábitos, sirve de ayuda como barrera de protección al fortalecer las defensas.
¿Cómo puedo fortalecer mis defensas?
Aquí te dejamos los factores clave que debes de cuidar:
Alimentación
No me cansaré de repetir que la base de una buena alimentación son las frutas, las verduras, las legumbres, los cereales integrales, las proteínas de calidad y las grasas buenas.
Estos alimentos te proporcionan vitaminas, minerales, fibra, omega 3, antioxidantes y otras sustancias, que se encargan de producir y mantener fuertes las defensas para un buen funcionamiento del sistema inmune.
Microbiota Intestinal
La microbiota intestinal son las bacterias buenas que se encuentran en nuestro intestino y se encargan de protegernos. Es importante mantenerla en buen estado, ya que actúan como barrera evitando la entrada de virus y bacterias perjudiciales.
Evita el exceso de azúcar, sal, productos muy procesados y grasas malas porque debilitan tu microbiota y, por tanto, tu sistema inmunitario. Aliméntalas con fibra y productos fermentados, como el yogur y el kéfir y fortalece tus defensas.
Mantener un peso adecuado
Las personas con obesidad tienen más probabilidades de desarrollar enfermedades metabólicas e infecciosas y tener alterada la función inmunológica. Por eso es tan importante evitar el sobrepeso, para tener una salud fuerte.
También hay que tener en cuenta que hay personas delgadas metabólicamente obesas y personas con sobrepeso con una salud perfecta. Es muy importante cuidar la alimentación y los hábitos de vida, imprescindible para fortalecer las defensas.
Descanso
Descansar adecuadamente y tener unos horarios estables de comida y sueño, evita desajustes en el cuerpo y mantienen su estabilidad.
Las personas que tienen un buen descanso, mantienen en mejor estado las células que se encargan de la defensa.
Fortalece tus defensas con otros hábitos
El ejercicio moderado estimula al sistema inmunitario y disminuye las hormonas del estrés, que hace justo lo contrario, te predisponen a enfermar.
El tabaco y alcohol son tóxicos para nuestro cuerpo y debilitan nuestras defensas, por eso es tan importante evitarlos.
Y sobre todo tener una buena actitud, ser positivos y evitar las preocupaciones excesivas, contribuye a tener un cuerpo sano y fuerte, además de un sistema inmune menos vulnerable para poder afrontar todo lo que le venga.