Cuando la gente habla de querer quemar la grasa del abdomen, en realidad se refiere a dos tipos diferentes de tejido graso: la grasa visceral y la grasa subcutánea.
La grasa subcutánea se almacena directamente debajo de la piel y es el tipo de grasa que puedes «pellizcar» de la barriga, los brazos, los muslos o casi cualquier otra parte del cuerpo. La grasa visceral, por otro lado, es mucho más difícil de identificar, ya que se almacena alrededor de los órganos internos en la región abdominal, incluyendo el hígado, el páncreas y el intestino.
El exceso de grasa visceral puede interferir con el funcionamiento del hígado e interrumpir la comunicación hormonal normal entre los órganos vitales. Esto puede provocar resistencia a la insulina (el comienzo de la diabetes), presión arterial alta, niveles altos de colesterol y un mayor riesgo de desarrollar enfermedades cardíacas.
El alto almacenamiento de grasa visceral también se ha relacionado con el cáncer de mama, el cáncer de colon y los accidentes cerebrovasculares.
¿Cómo puedes detener y revertir la acumulación de esta peligrosa grasa? Muy sencillo, cambiando tu estilo de vida, manteniendo una alimentación adecuada y haciendo ejercicio. Todos estos puntos son importantes para conseguir eliminar esta grasa tan peligrosa.
¿Tengo demasiada grasa abdominal?
Para saber si tienes demasiada grasa visceral, mídete la cintura, este puede ser un indicador fiable.
Una cintura de más de 102 cm para los hombres y 88 cm para las mujeres, es un indicador de tener demasiada grasa en el abdomen. Incluso si tuvieses un peso relativamente saludable y generalmente buena salud. Muchas enfermedades como la obesidad, diabetes tipo II y síndrome metabólico, están asociadas a un perímetro abdominal mayor.
Cómo reducir la grasa visceral y abdominal
- Sigue un plan de nutrición saludable y equilibrado
Consumir muchas frutas y verduras frescas te ayudará a llenarte y además te proporcionará fibra y nutrientes.
Tu plan de nutrición debe contener muchas verduras y frutas frescas, proteínas magras y carbohidratos complejos como legumbres y granos enteros para obtener energía y fibra.
Prueba a consumir grasas buenas, como son el aceite de oliva virgen extra, los frutos secos y los pescados azules.
¿Necesitas ayuda con tu plan de nutrición? Contáctame, puedo ayudarte.
- Aumenta la cantidad e intensidad de ejercicio
Realiza ejercicio moderado, es la forma más fácil de mantenerse activo la mayoría de los días de la semana.
Intenta hacer ejercicio al menos 30 minutos cada día. Si no estás acostumbrado al deporte, puede que al principio te cueste un poco más, pero te ayudará no solo a quemar calorías, sino a sentirte mejor.
Una pérdida de peso de entre el 5 y el 10 por ciento de su peso corporal total puede ayudar a reducir los depósitos de grasa visceral.
Para lograrlo, tu balance calórico diario (calorías consumidas menos las calorías quemadas) debe ser negativo. Puedes generar ese déficit calórico mediante el ejercicio.
Prueba el entrenamiento de circuito, la caminata rápida, bicicleta o cualquier actividad que pueda aumentar tu ritmo cardíaco y hacerte estar en movimiento durante una hora.
Además, dale una oportunidad al entrenamiento de intervalos de alta intensidad. Este tipo de ejercicio hace que la grasa abdominal total, incluida la visceral y subcutánea, no se acumule.
- Mantén una buena actitud y motivación
El apoyo social puede ayudarte a cumplir con tu plan y alcanzar tu objetivo de pérdida de peso.
La pérdida de peso lleva tiempo. No esperes perder peso de la noche a la mañana, después de todo, no lo ganaste de la noche a la mañana.
Sólo con una mínima pérdida de peso, tu estado mejorará y las reservas de grasa visceral irán disminuyendo y las complicaciones de salud. Esto es una buena motivación para seguir con un programa de alimentación y ejercicio.
También puedes pedir a tus amigos o familiares que te apoyen y te den ánimos para seguir con tu plan de salud. Recuerda que las personas que tienen a alguien a quien rendir cuentas tienen más probabilidades de alcanzar sus objetivos.
- Practica hábitos de vida saludables
Para mejorar su salud en general, intenta dejar de fumar, beber, estar inactivo y comer alimentos procesados con alto contenido de grasa. Elegir un estilo de vida más saludable mejorará tu calidad de vida.
También asegúrate de dormir bien y buscar actividades que te permitan estar relajado, ya que la hormona del estrés, el cortisol, aumenta significativamente el almacenamiento de grasa visceral.
Lo mejor es consultar con un nutricionista, te ayudará a diseñar un plan de nutrición para mejorar tu salud. Si necesitas mi ayuda para reducir la grasa visceral, contáctame.