La salud hormonal de las mujeres depende de muchos factores, entre ellos la alimentación. Existen muchos trastornos en los que intervienen las hormonas y estos pueden mejorar con la ayuda de algunos alimentos.
La función de las hormonas femeninas tiene un impacto directo sobre la salud de la mujer, entre otros regulando el ciclo menstrual, la salud en general, el peso y el estado de ánimo, razón por la que es importante mantener el equilibrio hormonal.
Nutrientes que regulan las hormonas femeninas
La mejor estrategia nutricional para la salud hormonal de las mujeres es seguir una alimentación equilibrada que incluya los siguientes nutrientes:
- Vitamina B6: ayuda al cuerpo a fabricar serotonina, la hormona de la felicidad y reduce los síntomas del síndrome premenstrual. Se encuentra en huevos, avena, frutos secos, plátanos o patata.
- Magnesio: tiene un efecto tranquilizante y antiinflamatorio. Puede aliviar las migrañas y los dolores menstruales. Se combina bien con la vitamina B6. Lo tienes en pipas de calabaza o de girasol, almendras, pistachos y espinacas.
- Hierro: previene la anemia y favorece la ovulación y la regularidad menstrual. Es importante en caso de menstruaciones abundantes. Se obtiene de legumbres, verduras de hoja verde, huevos, moluscos y semillas.
- Omega-3: tiene un efecto antiinflamatorio y participa en la modulación y síntesis de hormonas y neurotransmisores. Puede ayudar en casos de inflamación, sensibilidad mamaria, ansiedad o depresión asociadas al ciclo hormonal. Se consigue del pescado azul, las nueces y las semillas de lino y chía .
- Zinc: es un antioxidante que previene el envejecimiento celular y es imprescindible para el equilibrio hormonal. Está presente en el huevo, las setas, la avena, las pipas de girasol y de calabaza, los anacardos, las alubias o verduras como la endibia y la escarola.
Además de estos nutrientes, evita el consumo de alimentos que puedan afectar de forma negativa a las hormonas, como los pesticidas, el alcohol, los químicos y los alimentos muy procesados.
Otro aspecto a cuidar es el consumo de suficientes calorías y nutrientes esenciales para que el cuerpo ajuste y regule la producción de hormonas adecuadas.
Por otro lado, practica ejercicio de fuerza ya que tiene beneficios hormonales que te ayudan a mejorar la salud y el bienestar en general, así como aumentar la fuerza muscular, la densidad ósea y el rendimiento deportivo.
No dejes de consultarnos para ayudarte con un plan personalizado que se ajuste a tus necesidades y conseguir una salud hormonal óptima.